Si muriera esta noche

Casi me mato volviendo de Benicásim hoy. O eso me ha parecido a mí. Había un charco de aceite hacia el final de la carretera nueva que lleva une Benicásim con la Rda. Norte, la que sale al Hospital General (qué oportuno, ahora que lo pienso). Pisar charcos de aceite a 90 Km/h no es bien.

Sé que otras veces he estado en situaciones en que mi vida corría riesgo real, pero recordar ese tipo de acontecimientos es como recordar cuánto te dolía el brazo cuando te lo rompiste, por poner un ejemplo. Es algo que se recuerda acontecido, pero nunca con la intensidad del momento. Otra forma que tiene el cerebro de protegernos, supongo.

Es curioso cuando te suceden cosas que estudias. Amnésia retrógrada: no recuerdo nada desde el momento en que me he quedado cruzado en mitad de la calzada hasta llegar a casa.

El caso es este es el momento en el que tomas consciencia de lo que acaba de ocurrir, y tu mente va a toda leche pensando en cosas, casi todas bastante macabras. Aunque realmente no sé qué tiene de macabro la muerte. La muerte en realidad, nada; más bien la forma en que llega. Ahora mismo no estoy pensando en cosas macabras, simplemente pienso en la muerte. Y demás.

Es curioso como lo primero que piensas (al menos yo) no es en las cosas más, digamos, importantes, como todo lo que te queda por hacer, a quién dejas atrás, qué cosas no podrás volver a experimentar… No. Piensas en qué va a pasar con el ordenador que te has dejado encendido, quién recogerá el correo, en la presentación que tienes a medio hacer, en qué pensará quien te está esperando para hablar contigo, en cómo se enterará la gente y cómo reaccionará, en que se te va a pudrir la comida que tienes en la nevera… Cosas así.

He hecho una lista. Porque me encantan las listas. Y hay muchas cosas que no diría en voz alta. Pero ahora mismo, me cago en eso.

Qué me jodería si muriera esta noche…

• Dejarme enchufado el radiador hasta que me encontraran putrefacto en la cama
• No ver el final de Asedio, ni las películas de Green Lantern, Thor, Capitán América, Los Vengadores, etc., etc.
• No cerrar el fucking capítulo del Trabajo de investigación
• No poder verte una vez más por cinco míseros días
• No ser tío
• No ver casado a nadie de mis amigos
• Acudir a las ComiCon de San Diego y Nueva York
• Visitar Japón
• Escribir un libro
• Realizar un aporte significativo a la ciencia
• Perderme todas las cosas de nuestra lista
• Conseguir un Muñeco de acción de mí y los Calabazas
• Tirarme en paracaídas (sí, yo, en paracaídas. Qué cosas se te ocurren cuando crees que vas a morir, eh?)
• Asistir a un rodaje de cine
• Ir al Festival de Cine de Cannes y San Sebastián
• Asistir a un gran estreno en Hollywood
• Ser Doctor
• Dar clase en la Universidad
• Ver hacia dónde evoluciona Internet y las relaciones sociales
• Conseguir cinturón negro en Karate (volveré. Lo sé)
• Perderme el final de Smallville, Misfits, Dexter y demás series (pero sobre todo, no descubrir cómo conoció a su madre! Arrrghhh! PELMA!!!)

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Creo que lo voy a dejar aquí.

Vivimos los días sin pararnos a pensar. Para qué, estamos vivos, no? Tiene todo el sentido. Eso hace que sea mucho más fácil dejarnos llevar por la inercia. La inercia nos empuja a escribir listas de cosas que queremos hacer y no hacemos. Y lo peor es que nunca dejaremos de tener razones (y buenas razones) para ello. Pero como dice una muy buena amiga, «hay que querer»; hay que quererse y querer la propia vida. Porque luego bien que nos jode pensar en todo lo que nos perderíamos sin ella.

Sois libres de realizar vuestras propias aportaciones.

Sois libres y punto, qué demonios. Que no se os olvide.

Os quiero motherfuckers.